El 11 de abril tuvo lugar el día mundial del Parkinson, una de las enfermedades neurodegenerativas más conocidas del mundo. Destruye las neuronas que contienen dopamina y genera trastornos del movimiento. No es raro conocer un pariente o amigo a quien le hayan diagnosticado con Parkinson. En muchos casos, empieza a desarrollarse alrededor de los 60 años. Una mujer de 70 años compara los síntomas de la enfermedad a lavarse los dientes con muflas. Las alteraciones de los movimientos, los temblores, la rigidez muscular y la lentitud hacen difíciles los gestos del cotidiano.
Este fin de semana se han organizado muchos eventos vinculados al tema. Se habló del progreso en el conocimiento de la enfermedad, de terapias y de retos adicionales debidos a la pandemia de COVID-19. Sin embargo, también se habló de un tema reciente : la relación entre la microbiota intestinal y la aparición de la enfermedad de Parkinson.
Los dos ejes del método de Athletica son la neurología funcional (la activación del sistema nervioso) y la micronutrición (el equilibrio de la microbiota). Nuestra experiencia con más de 30’000 pacientes desde la creación del centro en Ginebra en 1997 nos permite tener un buen conocimiento de las relaciones entre la microbiota y la salud, sobre todo el sistema nervioso y las enfermedades neurodegenerativas.
Compartimos el artículo que publicó Kristina Campbell en Gutmicrobiotaforhealth.com. Explica cual es el vínculo entre la enfermedad de Parkinson y la microbiota del intestino. Entre el 50% y el 70% de la nutrición está transformada por la microbiota antes de ser absorbida. Hasta mil especies de bacterias viven en nuestro intestino. Cuando se pierden la simbiosis y el equilibrio bacteriano empiezan complicaciones e inflamaciones.
Para desarrollar su salud, enfrentar una enfermedad u optimizar su rendimiento deportivo, hay que mantener su microbiota con una micronutrición adecuada. Existen muchas publicaciones que permiten entender lo que compone una “buena alimentación”. La clave es conocerse a si mismo y al estado de su microbiota.
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